+ Seguridad en productos y servicios
+ Seguridad jurídica
+ Prestigio
+ Ahorro y eficiencia
+ Mercados
+ Acceso a compras públicas
La acreditación reduce las posibilidades de producir o proveer un artículo defectuoso.
La acreditación es una herramienta establecida a nivel internacional, por lo que seleccionar un proveedor de servicios de evaluación acreditado es fundamental, en caso de acción legal, para que la empresa pueda demostrar que ha actuado con la diligencia debida.
Los servicios de evaluación acreditados aportan fiabilidad y reconocimiento a los productos o servicios, lo que repercute directamente en la imagen de las empresas y la confianza de los clientes.
Los servicios de evaluación acreditados aportan valor en términos económicos, ya que reducen la posibilidad de que el mismo producto se vea sometido a evaluaciones redundantes con el consiguiente ahorro que supone, y es que las pruebas o ensayos de los productos conllevan costes y consumen tiempo, aun cuando se efectúan correctamente la primera vez.
La acreditación de ENAC es reconocida y aceptada en más de 100 países de todo el mundo, lo que permite que los resultados de los evaluadores acreditados sean aceptados más fácilmente por los mercados extranjeros. Esta aceptación, a la vez que permite acceder a nuevas oportunidades comerciales, contribuye a reducir los costes para fabricantes y exportadores, disminuyendo o eliminando la necesidad de repetir pruebas en el país de importación.
El uso de servicios acreditados se prima cada vez más en los pliegos de contratación pública de todo el mundo. En España, la Ley 9/2017, de 8 de noviembre, de Contratos del Sector Público, prima el uso de servicios acreditados como medio de prueba de la conformidad con los requisitos o los criterios establecidos en las especificaciones técnicas, los criterios de adjudicación o las condiciones de ejecución del contrato. Más información en la
Guía sobre el uso de la acreditación en compras públicas.